Lo Nuevo de Javier Trujillo

Carta a EYDAIMON

Ha pasado mucho tiempo desde que rompimos el contacto, y no negare que en parte seguimos todos un poco enojados, y en parte se le hecha de menos.

La sinceridad no parece haber sido nunca una de sus virtudes, lo cual espero este de acuerdo conmigo en que es algo triste, entendible en un ambiente hostil de desconocidos, pero triste cuando eso queda superado por la convivencia con otros que se ofrecen de manera sincera y abierta, y esa mano tendida queda vedada por esa falta de confianza y de la ya mencionada sinceridad.

Atrás quedaron los años de Satanred, ahora desaparecida. Atrás quedaron las genialidades de McKay convertidas en puñales de doble filo, siempre recordare cositas como aquel “Que esta usted diciendo, ¿lo contrario de la Fe?, ¡lo contrario de Fe es Ef!”

Atrás quedaron las excentricidades de FrayDiabolo y tantos y tantos otros, quien sabe cuantos.

Podríamos considerar que esto es, viejo amigo, ignoro si en la actualidad me considera enemigo, una rosa que deposito sobre la tumba de aquellos recuerdos de una época en la que aún me ilusionaba entrar en una web de satanismo, encontrar personas con ideas similares con las que compartir opiniones, iniciar proyectos, de las que aprender algo… de todo eso quedan tal vez astillas con las que ya ni se podría hacer fuego, pues ni el mismísimo portador de luz tiene la chispa adecuada para hacer de mi decepción rebrotar brasas. Esa decepción que se ha ido clavando como una espina en la frente del puñetero Jesús cristo, desde aquella vieja satanred. Decepción que tal vez empezó con usted, pero de la que en nada le culpo, pues se ha ido alimentando conforme he encontrado falta de valores, egos demasiado hinchados, actitudes pretenciosas, enemigos de todo, hasta de si mismos, pretendidos Mesías sectarios de distintos ordenes, sedientos de esquilmar borregos… y sobre todo eso, borregos incapaces de entender y ansiosos por obedecer las ordenes de quien quiera quitarles la lana, violarlos y luego comérselos vivos.

«quemapollos» que diría uno que yo me sé;

Así, que “viejo chivo”, lo quiera usted o no, y tanto si se considera usted víctima u ofendido, o tal vez al contrario se lamente de no haber sabido en que momento fue conveniente obrar de otra manera y comportarse con nosotros como lo que nosotros le considerábamos, un amigo, tan sólo decirle que pese a todo no ha perdido usted la plaza en nuestras memorias, el sitio en el respeto que se ganó con exposiciones y razonamientos, aunque fueran otros tiempos.

Por que Mister Eydaimon, usted era Satanred;